Ya obtienen el 100% de la electricidad que consumen con paneles fotovoltaicos, en lugar de generadores a combustible. El objetivo es llegar a 11 pueblos solares en la provincia.
El abastecimiento energético se transforma en un gran desafío en regiones de difícil acceso y que no están conectadas a la red de distribución nacional. En la mayoría de los casos, las localidades de este tipo emplean grupos electrógenos alimentados con combustibles fósiles para generar electricidad.
En ese marco, Jujuy lanzó el plan Pueblos Solares, cuyo propósito es reemplazar esa generación por una más limpia. Esta semana, se inauguraron las centrales fotovoltaicas en los pueblos de Catua, El Toro y San Juan de Quillaques, en el departamento Susques.
Se anunció de manera oficial de que esos lugares son ahora considerados pueblos solares de la provincia.
Así, ya son ocho los “Pueblos Solares” en la provincia: Olaroz Chico, San Francisco de Santa Catalina, El Angosto de Santa Catalina, La Ciénaga de Santa Catalina y Lipán de Moreno. El proyecto se enmarca dentro del Plan Maestro Plurianual de Desarrollo y en sintonía con las metas mundiales de energías limpias.
La puesta en marcha de estas plantas significa abastecimiento para 124 hogares en Catua, 80 en El Toro y 45 en San Juan de Quillaques. De esta manera, los pueblos contarán con energía eléctrica las 24 horas los 365 días, ya que la alimentación solar se almacena en baterías de ion litio.
Las inauguraciones se efectuaron el martes 5 de diciembre, a través de una comunicación virtual, entre el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales y los comisionados de las localidades. Así, se anunció de manera oficial de que esos lugares son ahora considerados pueblos solares de la provincia.
El objetivo de 11 pueblos solares
“Esta es una manera de colaborar con el planeta, hay que seguir cuidándolo y la Puna es un ejemplo”, afirmó Morales. Asimismo, adelantó que están en etapa de construcción otras dos plantas en los pueblos de Tartajal y Santa Ana, y que se pondrán en funcionamiento dentro de poco.
Además, aseguró que el objetivo de la provincia es llegar a 11 pueblos solares. “Haber roto el paradigma de la generación con energía con combustibles fósiles. Ahora habrá energía las 24 horas y con la mejor. Hubo una fuerte decisión de parar con la deforestación y cuidar nuestro planeta”, concluyó.
Durante la ceremonia de inauguración, desde Catua, el secretario de Energía provincial, Mario Pizarro, recordó que el impulso de los pueblos solares se inició en 2016, orientado al «principio de igualdad para quienes viven en la Puna, que debían abastecerse con grupos electrógenos, con solo entre 8 o 12 horas de servicio».
Por su parte, el comisionado municipal de Catua Rubén Nieva, destacó que «es un honor contar con un parque en el pueblo, dejando de usar combustibles fósiles, lo que nos lleva al cuidado del ambiente y el aprovechamiento de las energías renovables». La pequeña localidad se ubica a unos 3.950 metros de altura sobre el nivel del mar.
Juan Cruz, presidente de la comunidad encuadró la jornada como un «día histórico» para los pobladores locales, y que significará un «enorme cambio» por las pocas horas de luz a las que accedían y los «inconvenientes» que se generaban con los grupos electrógenos.
Por último, Ernesto Vaccaro, gerente general de Ejesa, empresa distribuidora de la energía eléctrica en la provincia, a cargo de la operación y mantenimiento de las nuevas plantas fotovoltaicas, destacó los sistemas instalados, con «diseño e innovación local» que incluye el almacenamiento de la energía en baterías de litio, y una «capacidad que permitirá no solo abastecer el consumo domiciliario, sino también el desarrollo productivo local».