Este aumento procederá del uso y desarrollo de la IA Generativa, que requiere de una demanda de energía más intensa que otras tecnologías. Hace días, Javier Milei anunció un plan nuclear enfocado en abastecer a este segmento.

Un informe de la consultora Deloitte proyecta que el consumo energético de los centros de datos podría duplicarse para 2030, alcanzando los 1.065 teravatios-hora (TWh), lo que representaría el 4% del consumo de electricidad global y -también- una potencial oportunidad para la energía nuclear argentina y su avanzado desarrollo de pequeñas centrales modulares.

Este incremento estará impulsado principalmente por el avance y la adopción de la Inteligencia Artificial Generativa, que demanda un uso de energía considerablemente mayor que otras tecnologías.

Estas cifras parecen alinearse perfectamente con los recientes anuncios del gobierno de Javier Milei, que presentó un plan nuclear enfocado en abastecer de energía a los centros de entrenamiento de inteligencia artificial (IA) en el país.

«Queremos atraer inversiones de altísimo grado en IA. Que nadie se sorprenda si la Argentina se convierte en el próximo hub del mundo. De hecho, no es casualidad que las mayores empresas del mundo estén evaluando proyectos en el país”, dijo recientemente el Presidente.

El análisis forma parte de la 24ª edición del informe TMT Predictions 2025 de Deloitte, un estudio que examina las principales tendencias que impactarán a las empresas y consumidores del sector de Tecnología, Medios y Telecomunicaciones (TMT) en los próximos años.

El informe no solo subraya el desafío energético que plantea la IA Generativa, sino que también explora su expansión en dispositivos emergentes y el desarrollo de agentes autónomos capaces de ejecutar múltiples tareas sin intervención humana.

Además, aborda otros retos clave para el futuro, como la evolución del streaming y las transformaciones en la industria global de telecomunicaciones.

En este contexto, el papel de la IA Generativa se destaca como uno de los factores centrales que moldearán el panorama tecnológico y energético en la próxima década.

El papel clave de las tecnológicas en energías renovables

Las empresas tecnológicas, desde proveedoras de servicios en la nube hasta fabricantes de semiconductores y operadores de centros de datos, están desempeñando un rol crucial en el impulso de la eficiencia energética y la transición hacia fuentes de energía renovables.

Entre las medidas ya implementadas destacan el desarrollo de chips más eficientes, soluciones innovadoras de enfriamiento, diseños sostenibles tanto en materiales como en instalaciones, y la adopción de fuentes de energía libres de carbono.

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Anticipan que el consumo energético de los centros de datos podría duplicarse para 2030, dato que alienta los planes de energía nuclear anuciados recientemente por el Gobierno argentino.

Si bien estas iniciativas están ayudando a mitigar el impacto energético actual asociado a la Inteligencia Artificial Generativa, los expertos advierten que su efecto significativo en la reducción del consumo energético tardará años en materializarse.

“El desarrollo de la IA Generativa no solamente transformará el mundo empresarial y económico, sino que implicará cambios profundos en la vida cotidiana de toda la población. Las decisiones que tomemos hoy en su desarrollo marcarán el futuro”, afirmó Ana Sánchez Palacios, socia responsable del sector TMT en Deloitte.

Sánchez Palacios también subrayó los desafíos que plantea este avance tecnológico: “Marcar el camino de la IA Generativa implica enfrentarnos a numerosos retos. Con confianza, inclusión y sostenibilidad como pilares fundamentales, podemos asegurar que este progreso beneficie no solo a esta generación, sino también a los negocios, consumidores y comunidades futuras”.

Energía nuclear: los planes de la Argentina

Durante su discurso en cadena nacional, en el que realizó un balance del primer año de su gestión, Milei destacó que la Argentina cuenta con todos los recursos necesarios para alimentar los clusters de IA.

“Nosotros tenemos energía de sobra, tierras frías e inhóspitas de sobra, el recurso humano de calidad también de sobra”, afirmó.

«Estos tres factores combinados forman una tormenta perfecta para atraer inversiones de altísimo grado en IA. Que nadie se sorprenda si la Argentina se convierte en el próximo hub del mundo. De hecho, no es casualidad que las mayores empresas del mundo estén evaluando proyectos en el país”, subrayó.

En esa misma línea, el presidente amplió detalles sobre el proyecto, anunciando la creación de un Plan Nuclear Argentino que impulse la construcción de nuevas centrales nucleares destinadas a suplir la alta demanda energética que requieren estos desarrollos tecnológicos.

Aunque no especificó qué línea tecnológica se adoptará, recordó que el país cuenta con una tradición en el uso de uranio natural y agua pesada.

“El aumento de demanda de energía que implica la IA va a generar en el mundo entero un resurgimiento en la energía nuclear después de décadas de declive. Y nosotros no nos vamos a quedar atrás, vamos a diseñar un plan nuclear argentino que contemple la construcción de nuevos reactores, así como la investigación de las tecnologías emergentes de reactores pequeños o modulares, manteniendo los máximos estándares de seguridad y eficiencia”, afirmó el Presidente.

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