El índice que mide los gastos operativos del sector registró una aceleración respecto a mayo, pero por debajo del pico de abril. La suba estuvo impulsada por el combustible, los salarios y los gastos generales.
Los costos del transporte en camión en la Argentina registraron un incremento del 2,56% en junio, según el relevamiento mensual que elabora la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC). La entidad compartió el documento tras emitir un reclamo sobre el estado de las rutas nacionales.
Este avance implica una aceleración frente al 0,8% de mayo, aunque todavía se mantiene por debajo del 3,8% anotado en abril, el valor más alto del primer semestre. Con estos datos, el Índice de Costos del Transporte acumula una suba del 14% en este año, mientras que en términos interanuales el aumento alcanza el 32,8%.
Aunque mayo había dado una señal alentadora, con una suba de apenas 0,81 %, junio interrumpió esa pausa y reinstaló la preocupación”, afirman desde la FADEEAC.
El informe, que cuenta con la auditoría técnica de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, analiza once componentes que inciden directamente en la estructura de costos del sector. Los principales impulsores del alza fueron el precio del combustible, los ajustes salariales, las reparaciones y el incremento de los gastos generales.
El contexto macroeconómico y el transporte en camión
A su vez, el contexto macroeconómico sigue jugando un papel determinante: la devaluación registrada en abril y las tasas de financiamiento más elevadas impactaron en el precio de diversos insumos estratégicos.
El combustible, uno de los factores con mayor peso dentro del índice, mostró en promedio una suba del 3,68%. No obstante, el alza no fue uniforme: mientras Axion, Shell y Puma aplicaron incrementos superiores al 6%, YPF moderó los ajustes al 1,5% en junio y 3,5% en los primeros días de julio.
En paralelo, el Gobierno decidió postergar nuevamente la aplicación total de los impuestos específicos al gasoil a través de los decretos 368/25 y 441/25, lo que permitió atenuar parcialmente el impacto en los valores de venta al público.
El rubro Gastos Generales fue el que mostró la mayor variación mensual, con un incremento del 3,83%, seguido por el ítem Personal, que subió 3,12% debido a la actualización salarial prevista por el convenio colectivo CCT 40/89, que contempla aumentos escalonados entre junio y agosto.

También se destacaron las subas en Reparaciones (2,35%) y en el Costo Financiero (2,53%), en un escenario donde las condiciones de la red vial agravan la presión sobre las unidades. Los Peajes, por su parte, tuvieron un ajuste más leve, del 0,58%.
En contraste, algunos componentes del índice no sufrieron modificaciones durante junio. Neumáticos, Lubricantes, Material Rodante, Seguros y Patentes se mantuvieron sin cambios, siendo este último un ítem de actualización anual.
Expectativas para el segundo semestre
El comportamiento de los costos durante el primer semestre de este año sugiere una inercia que no se revierte fácilmente, aun cuando la inflación general comience a desacelerarse. Elementos como la indexación salarial por paritarias, la evolución del tipo de cambio oficial y la falta de mejoras sustanciales en infraestructura siguen ejerciendo presión sobre la estructura logística.
“Aunque mayo había dado una señal alentadora, con una suba de apenas 0,81 %, junio interrumpió esa pausa y reinstaló la preocupación”, reconocen desde la Federación.
Las expectativas para el segundo semestre son inciertas. Si bien algunos analistas anticipan una menor volatilidad macroeconómica, la negociación de tarifas entre empresas de transporte, clientes y proveedores estará condicionada por los nuevos niveles de costos.
En ese sentido, el comportamiento mensual del ICT se convirtió en una referencia clave para discutir ajustes en contratos logísticos, sobre todo en un contexto en el que las empresas buscan preservar márgenes sin trasladar íntegramente las subas al precio final.