La medida de fuerza que había paralizado la producción en Vaca Muerta comenzó el domingo luego de que uno de los trabajadores sufriera la amputación de un brazo en un accidente. Se acordó trabajar en la revisión de los protocolos de seguridad.
Trabajadores y empresas que se desempeñan en la formación Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén, participaron este lunes de una audiencia arbitrada por el Ministerio de Trabajo en medio del conflicto que surgió a partir de un accidente registrado el miércoles pasado y merced del cual un trabajador perdió uno de sus brazos.
Ello motivó una paralización total de la actividad en la cuenca neuquina y la reunión hoy para intentar destrabar en la cartera que conduce Raquel “Kelly” Olmos.
Según informaron desde la cartera laboral, las partes acordaron seguir trabajando en un esquema de protocolo de evacuación sanitaria, tras la medida de fuerza de los petroleros para protestar por la falta de una respuesta adecuada y a tiempo ante un accidente de estas características.
El ministerio de Trabajo intervino horas después de iniciado el conflicto, convocó a las partes a dialogar y dictó la conciliación obligatoria para que puedan negociar y acordar un nuevo protocolo de seguridad sanitaria.
La audiencia, que tuvo lugar en la mañana de este lunes, concluyó con el dictado de la conciliación obligatoria, que por ley fija que las partes que intervienen en el conflicto retrotraigan las condiciones previas al comienzo de las medidas, para dejar un espacio de negociación. Esto había sido requerido por las cámaras empresariales que realizan la explotación de petróleo en la formación ubicada en el sur del país.
La suspensión de la actividad la determinó ayer por la tarde el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa. A partir de las 20 la actividad en todas las explotaciones ya estaba paralizada. “Se acabó la paciencia, empieza la acción”, manifestó ayer la Comisión Directiva del gremio a través de un comunicado en el que se explicaron los motivos de la medida de fuerza.
La intervención del ministerio de Trabajo había sido solicitada por el sector empresario, ante la paralización total de la actividad. “Los sindicatos de petroleros privados y personal jerárquico comenzaron en el día de la fecha (por el domingo), de forma unilateral y sin aviso previo alguno, un paro general de actividades en el ámbito de las provincias de Neuquén, Río Negro y La Pampa, con la consiguiente afectación de la producción y distribución de hidrocarburos”, advirtió la Cámara de Empresas Productoras de Hidrocarburos (CEPH), en una nota dirigida a la ministra de Trabajo.
La mediación de Trabajo se produjo horas después y, cómo resultado del intercambio entre las partes, tanto los representantes del sindicato como los directores de las empresas que participan de la explotación de petróleo en el lugar pactaron revisar y realizar ajustes en la aplicación del protocolo de seguridad y evacuación del área, algo que ya existía pero que registró inconvenientes en su aplicación, según observaron desde el gremio.
Cómo fue el accidente
El reclamo se originó a partir del accidente laboral que sufrió un empleado de CAPEX el pasado miércoles 17 de mayo. El operario del equipo SAI 651 del yacimiento de Aguada del Cajón en Plottier sufrió la amputación de uno de sus brazos.
Según precisó el diario Río Negro, el trabajador de 29 años de edad fue alcanzado por una polea que le cortó una de sus extremidades superiores. El joven fue trasladado en un vehículo particular de la empresa hacia un centro de salud donde fue intervenido y se encuentra internado en observación.
“Cansados de los accidentes trágicos que cuestan vidas o dejan trabajadores mutilados y ante la ausencia de respuestas de parte de las empresas y del Gobierno Nacional para poner fin a esta situación, decidimos poner en marcha un plan de lucha definido el jueves pasado”, había comunicado como respuesta el sindicato. Finalmente, las medidas de fuerza quedaron suspendidas y la actividad en Vaca Muerta se retomará con normalidad en las próximas horas.