El presupuesto presentado el domingo por la noche por Javier Milei ante la Asamblea Legislativa, establece límites en lo que hace a las partidas que serán destinadas, tanto a la estatal Aerolíneas Argentinas, como al transporte público, sobre todo al que circula en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
En lo que hace a la controvertida Aerolíneas Argentinas, el Presupuesto proyectado para el próximo año, estima una recaudación por ingresos corrientes del orden de los 2,7 billones de pesos, recibiendo un subsidio de parte del Estado de 73.300 millones de pesos.
El Gobierno, al respecto, ratificó su decisión de avanzar en la privatización de la compañía y para ello anticipa la reducción, en la mayor medida posible, de sus gastos operativos.
En medio de nuevos anuncios de medidas de fuerza, y mientras desde el Ejecutivo avanzan con denuncias judiciales a los gremios -tras declarar la esencialidad del servicio-, el Presupuesto 2025 anticipa nuevos ruidos en la relación. El aporte estatal será sensiblemente menor, y demandaría que la empresa estatal consiga financiamiento privado para solventar cualquier inversión.
El Presupuesto 2025 implica nuevos ajustes en Aerolíneas Argentinas, y que el boleto de trenes y colectivos acompañe la inflación en el año electoral.
El anuncio confirma no sólo esa exigencia, si no también la decisión de profundizar la política de cielos abiertos re implementada desde diciembre del año pasado.
Por lo que, una vez descontados los gastos operativos, que ascenderán a 2,752 billones de pesos, la compañía de bandera lograría un resultado económico positivo de 20.667 millones de pesos.
Está prevista, por otra parte, una “inversión real directa” de 160.000 millones de pesos, con un aporte del Estado en este ítem de 579 millones de pesos, y se estableció que la empresa deberá procurar por sí misma la financiación de los gastos de capital.
Trenes y colectivos, sin nuevos subsidios en el Presupuesto 2025
En el sector de transporte, se planificó en el Presupuesto para el año venidero, un aporte económico de 1,04 billones de pesos, que serán destinados a la operadora ferroviaria estatal SOFSE, para que pueda continuar operando, ya que con a recaudación por boletos, apenas lograrán cubrir el 13% del total de sus gastos operativos.
De esos números se desprende que, en principio, los boletos de los trenes metropolitanos van a subir acompañando la inflación, no sumando nuevos subsidios.
En el transporte urbano de colectivos para el AMBA, que están bajo la órbita nacional, las transferencias previstas para los servicios se mantendrán en los mismos niveles de 2024, esto es 936.000 millones de pesos anuales.
Los datos llegan tras la última suba de tarifas (se implementó el 16 de septiembre) en el AMBA, luego de las protestas de algunos gobernadores cuando parecía que el gobierno mantendría la tarifa congelada en la región metropolitana.
Con estos números, las tarifas de las líneas metropolitanas se irían al doble de lo que cuestan hoy y así poder compensar el congelamiento virtual de los subsidios y los mayores costos operativos que tendrán que afrontar las empresas de colectivos durante el próximo año.
Según las proyecciones oficiales, la cantidad de viajes diarios en los ómnibus del AMBA, se elevará a 9.432.576 en 2025, contra la cifra que se prevé para este año, que será de 9.247.624 viajes.
En el interior del país, las líneas urbanas pasarán de 2.771.262 viajes diarios de este año, a 2.826.687 para el año próximo.
Para seguir extendiendo la red SUBE, se anunció la instalación de 1.600 nuevas validadoras y y el reemplazo de 26.000 lectoras en colectivos y estaciones de trenes que quedaron obsoletas y no pueden recibir pagos que superen los 1.000 pesos por viaje.
