Se trata de la contratación de buques alijadores con los que apunta a asegurar el suministro de gasoil a las centrales térmicas. Así, se espera que la estatal siga interviniendo fuerte en el mercado.
Esta semana, Cammesa lanzó una licitación para contratar cinco buques alijadores y asegurar el suministro de gasoil a centrales de generación eléctrica para el 2025. Y lo hace luego de que la Secretaría de Energía prohibió que la mayorista continúe comprando combustibles líquidos para las centrales térmicas.
Si bien los alijadores no movilizan cargamentos son claves para el abastecimiento, ya que trasvasan gasoil y fuel oil desde buques tanques o desde terminales portuarias hasta el sitio final de consumo (cada central térmica). Cammesa recibirá las ofertas de la licitación hasta el 1° de octubre y el resultado se conocerá el 17 de octubre.
Eduardo Rodríguez Chirillo quería que la compra de combustibles vuelva a depender directamente de las empresas privadas.
Con este procedimiento, se anticipa que pese a lo anunciado y la intención de quitarle influencia en el mercado, el año próximo Cammesa cumpliendo un rol central en lo que hace a la provisión de combustibles a las centrales generadoras.
La intención del secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, es que la compra de combustibles vuelva a depender directamente de las empresas privadas, como sucedió durante la década del ’90. Pero aparentemente, eso tendrá que esperar.
Sucede que, en contraparte a la posición del titular de Energía, las empresas generadoras consideran que no están las condiciones dadas para ese traspaso de la responsabilidad al sector privado.
Esto responde a que el funcionamiento actual del mercado todavía es altamente dependiente de los subsidios que eroga el Tesoro nacional y por tanto administrado por el Estado.
Según informaron fuentes cercanas a Camessa al medio Econojournal, que tuvo acceso a los pliegos de la convocatoria y difundió la información, ésta sería la última licitación que realizará la empresa estatal en incumplimiento a la reciente disposición de Energía.
La licitación de Cammesa y los buques para el gasoil
La convocatoria lanzada por Cammesa busca asegurar la logística marítima de los combustibles destinados al parque de generación eléctrica desde el 1° de diciembre de este año y para todo el 2025.
La idea es acelerar el proceso ya que empieza a ver incertidumbre en torno a los buques alijadores. En el sector naviero señalan que varias compañías armadoras que gestionan la operatoria de estos navíos están evaluando sacar del país algunas de las embarcaciones contratadas por Cammesa y también petroleras privadas (como YPF, Raízen y Axion Energy).
Las empresas navieras que hoy están contratadas por Cammesa son la chilena Antares; Horamar, controlada por el grupo griego Navíos; National Shiping y Maruba. Las dos primeras poseen contratos vigentes que expiran el 30 de noviembre.
Los contratos de las dos últimas, en cambio, vencen el 30 de septiembre. “Por eso, tanto Maruba como National Shipping solicitaron formalmente que se extienda la duración de sus contratos hasta que se conozcan los ganadores de la nueva licitación, porque en caso contrario tendrían menos incentivos en participar de la compulsa”, explicaron fuentes del sector.
La prohibición impuesta desde Energía
A través de la Resolución 150/2024, la cartera encabezada por Eduardo Rodríguez Chirillo derogó la normativa de 2005 que permitía a la compañía mayorista importar combustibles líquidos.
Esta función permitía que la firma abasteciera a las centrales eléctricas en casos de necesidad, como sucedió en el último mayo con la crisis de abastecimiento de gas. Su puesta en vigencia se había enmarcado en el escenario nacional que se desencadenó con la crisis de 2001, la caída de la Convertibilidad y el congelamiento tarifario.
El objetivo de Chirillo busca restringir las competencias de Cammesa al marco regulatorio de los años ’90, pero la medida no especifica quién asumirá ahora la compra de combustibles
