YPFB espera confirmar el potencial de formaciones profundas en una zona clave del sur boliviano. La iniciativa forma parte del programa oficial para reimpulsar el desarrollo energético tras años de declive.
La caída sostenida de la producción de gas natural en Bolivia alteró de forma significativa su posicionamiento regional como proveedor energético. Durante años, el país fue una de las principales fuentes de abastecimiento para naciones de la región como Brasil y Argentina.
Sin embargo, la merma en los volúmenes disponibles obligó a revisar contratos y abrió espacio para el gas no convencional proveniente de Vaca Muerta. En ese contexto, el país vecino comenzó a reorientar su política hidrocarburífera priorizando proyectos con impacto directo en el abastecimiento local, aunque sin abandonar la exploración.
El proyecto de la petrolera estatal de Bolivia prevé alcanzar una profundidad final de aproximadamente 4.500 metros.
Una de las iniciativas centrales en esta etapa de reconversión es la perforación del pozo exploratorio Bermejo-X46 Dirigido (BJO-X46D), ubicado en el departamento de Tarija. Según informó Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), la perforación ya superó los 3.900 metros y se encuentra próxima a alcanzar las formaciones geológicas Huamampampa y Santa Rosa, donde se espera encontrar nuevos reservorios de gas.
“Estamos haciendo patria en Tarija. La perforación en el Subandino Sur se ralentiza un poco dada la complejidad de la estructura, pero estamos próximos a los objetivos planteados”, señaló Fernando Arteaga Pinto, gerente nacional de Exploración y Explotación de la empresa estatal.
La campaña de exploración en Bolivia
El proyecto prevé alcanzar una profundidad final de aproximadamente 4.500 metros, una cifra considerable que da cuenta tanto del desafío técnico como del potencial del área. Una vez completada la perforación, se realizará una evaluación del potencial hidrocarburífero de ambas formaciones, tarea clave para definir los siguientes pasos en el desarrollo del pozo.
La inversión estimada para esta fase exploratoria asciende a 518 millones de bolivianos, lo que equivale a cerca de 75 millones de dólares, con beneficios económicos previstos para el municipio de Bermejo, donde se desarrolla el operativo.
Una vez finalizada la perforación, se contempla la construcción de facilidades de superficie, la interconexión a la red de transporte y la adecuación de la planta de procesamiento de gas, lo que permitirá integrar la producción al sistema nacional.
De acuerdo con las proyecciones de YPFB, el potencial recuperable asociado al pozo asciende a 0,2 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas. Esta cifra, aunque modesta frente a los grandes yacimientos del pasado, podría ser significativa si se confirma su viabilidad y se considera su ubicación estratégica.
“Sabemos que la población de Bermejo necesita el gas, Bolivia necesita el gas y estamos responsablemente trabajando para poder entregar el pozo con resultados positivos”, remarcó Arteaga Pinto.
En paralelo a la perforación, los equipos técnicos también trabajan en la validación de modelos geológicos y en la recolección de información petrofísica que permita mejorar la comprensión del subsuelo. Estos datos no solo son esenciales para la evaluación del pozo en curso, sino que también sirven como insumo para futuras campañas exploratorias en el área y otras zonas similares del país.
Detalles de la perforación
Una de las herramientas utilizadas en la perforación es el equipo SINOPEC-164, con una potencia de 2.000 caballos de fuerza. Este tipo de equipamiento, de origen chino, está diseñado para operar en entornos geológicos complejos como el Subandino Sur, donde las estructuras profundas y los pliegues tectónicos requieren un control técnico preciso.
La selección del equipo también responde a la necesidad de garantizar seguridad operativa y eficiencia en los tiempos de perforación. El BJO-X46D forma parte del Plan de Reactivación del Upstream (PRU), una iniciativa de YPFB que busca revertir la tendencia declinante de la producción.
El brazo operativo a cargo del proyecto es la Gerencia Nacional de Exploración y Explotación, que coordina los trabajos en campo y la supervisión técnica de cada etapa. La zona de intervención se encuentra en el municipio de Bermejo, dentro de la provincia Aniceto Arce, en el departamento de Tarija.
Esta región, históricamente vinculada a la actividad hidrocarburífera, se convirtió en una de las apuestas prioritarias para el reposicionamiento del sector gasífero boliviano. El éxito o fracaso del BJO-X46D podría incidir directamente en el rumbo que adopte la política energética en los próximos años.
