Tras un primer cuatrimestre con superávit de 260 millones de dólares, mayo derrumbó el acumulado del año a un déficit de 220 millones. El saldo, igualmente, sigue siendo sensiblemente mejor al del mismo período de 2022.
La balanza energética de la Argentina se revirtió en el acumulado de los primeros cinco meses del año y de un superávit superior a los 200 millones de dólares pasó a registrar un déficit de similar magnitud. Los resultados de mayo resultaron el condicionante. Y el factor común, tanto para las importaciones como las exportaciones del sector, fueron las variaciones de los precios internacionales.
El saldo comercial del sector, diferencia en dólares que se desprende de las importaciones y ventas de energía al exterior, registró un negativo de unos 220 millones de dólares en el acumulado entre enero y mayo de este 2023.
De esta manera se revirtió la tendencia que venía mostrando el sector y que en el primer cuatrimestre había registrado un superávit de 260 millones de dólares. Un solo mes desandó el camino.
Hubo reducción en las cantidades exportadas, pero también en las importaciones. El principal factor del resultado acumulado, entonces, fueron los precios internacionales de la energía.
Así lo dejaron en evidencia los datos oficiales difundidos por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) en su último informe de Intercambio Comercial Argentino (ICA).
A nivel general, lo que se desprende del documento es que el principal factor del resultado acumulado fueron los precios internacionales de la energía, que jugaron a favor y en contra de la Argentina. Esto se ve claramente porque no solo hubo una reducción en las cantidades exportadas, sino también una caída en los volúmenes importados.
Impactó también en la balanza la mayor demanda de energía por la llegada de los meses más fríos del año.
Según datos extraídos del informe del Indec, los dólares generados por las exportaciones englobadas en la categoría Combustibles y Energía (CyE) de los primeros cinco meses fueron 3.233 millones. En términos interanuales no se identificó ninguna variación. En el mismo período del año pasado el acumulado fue similar (3.234 millones de dólares).
En lo que hace a importaciones, en el período de análisis se gastó un total estimado por el Indec de 3.455 millones de dólares. En 2022, los desembolsos en los mismos meses acumulados habían sido de 4.656 millones de dólares. Esto significa que en este comienzo de año se redujo en unos 1.201 millones interanual.
De este modo, los datos oficiales dan cuenta de que, más allá del saldo negativo en el acumulado de los primeros cinco meses del año, la situación está por encima del desempeño del 2022, cuando en el mimmo período se registró un déficit muyo mayor, de unos 1.422 millones de dólares.
Exportaciones e importaciones en mayo
A nivel nacional y durante el quinto mes del año se registraron exportaciones por un total de 531 millones de dólares, que equivalen a una caída interanual de un 5,5%.
Según indicaron desde el Indec, esto se debió a una baja de 38% en los precios, ya que las cantidades aumentaron un sostenido 53,5%. El descenso se debió a la menor venta de carburantes por unos 113 millones de dólares.
Respecto a las importaciones, en mayo hubo compras al exterior por un total de 992 millones de dólares, una caída interanual de 38,6%.
De todas las categorías del Indec, el uso económico que más cayó fue el energético, con una variación de 624 millones de dólares. «Se debió a una baja de 24,2% en las cantidades y de 19,8% en los precios. Esta disminución correspondió a menores importaciones de combustibles y lubricantes elaborados y de combustibles y lubricantes básicos. Los primeros reflejaron el mayor descenso de todos los rubros (-472 millones de dólares)», detalló el informe.
