El acuerdo con las petroleras para mantener hasta noviembre el valor en surtidores enfrenta la escalada del crudo. El rol de los fondos buitre ante el recorte voluntario de la producción en Arabia Saudita y Rusia.
Desde que Arabia Saudita y Rusia confirmaron que, con la intención de empujar el precio del petróleo, sostendrían hasta fin de año el recorte en su producción, la cotización del barril de crudo sigue en alza y ya se acerca a los 100 dólares.
Además, de acuerdo con los analistas de mercado los inversores anticipan un déficit todavía mayor de la oferta de cara al cuarto trimestre del año.
De hecho, el ministro de energía de Arabia Saudita, el príncipe Abdulaziz bin Salman, advirtió hoy sobre la incertidumbre en torno a la demanda china, el crecimiento europeo y las medidas de los bancos centrales para abordar la inflación, y defendió los recortes al suministro del mercado de petróleo que se decidieron desde la OPEP+.
En tanto, a la baja voluntaria de la producción se sumó la disparada de las operaciones de apalancamiento por parte de fondos de inversión especulativos que se volcaron al mercado y sumaron presión a los precios.
Este escenario con precios internacionales al alza choca de frente con la decisión de congelar el precio de los combustibles en un intento por morigerar las presiones inflacionarias.
Así, el crudo West Texas Intermediate (WTI), que cotiza en el mercado de futuros de Nueva York (Nymex), escala este martes otro 1,08% y se comercializa a 92,47 dólares el barril en los contratos con entrega en octubre; en tanto que el Brent, que opera en el mercado electrónico de Londres (ICE), trepa otro 0,86% y se negocia a 95,24 dólares en los contratos para su entrega en noviembre próximo.
Este escenario con el precio del petróleo al alza choca de frente contra el intento del gobierno nacional de sostener el precio de los combustibles para morigerar las presiones inflacionarias.
El impacto del precio del petróleo en el acuerdo
El 17 de agosto pasado, tras las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), se llegó a un acuerdo con las principales refinerías y petroleras del país para congelar el precio de los combustibles por 75 días. El acuerdo vence el 31 de octubre próximo.
En ese momento las compañías petroleas acordaron bajar de 61 a 56 dólares el precio que abonan las refinerías por el petróleo que procesan, es decir una reducción del 8% a pesar del contexto que marcaba que los precios de los combustibles tenían cerca de un 20% de atraso y el petróleo que se exportaba lo hacía a más de 70 dólares.
Hoy esa diferencia es todavía mayor.
La creciente presión sobre los números del sector se da por dos vías: la disparada de la inflación que afecta los ingresos de las refinerías y petroleras que no pueden actualizar sus precios, y el salto del precio del petróleo, que pasó, en el caso del Brent, de los 85,24 dólares por barril al momento de alcanzarse el acuerdo, hasta los 95,24 dólares que cotiza hoy.
La contracara: producción en alza en la Argentina.
Según del Centro de Estudios para la Producción, que depende de la Secretaría de Industria, la producción de petróleo crudo, impulsada principalmente por Vaca Muerta, registró un incremento interanual del 6,4% en julio pasado cuando alcanzó los 3 millones de metros cúbicos y registró el mejor período enero-julio desde el 2007.
El acumulado entre enero y julio (21,3 millones de metros cúbicos) resultó el mejor desde el 2007, con un aumento del 10,3% sobre el mismo período del 2022.
En tanto, «la producción convencional cayó de manera interanual 3,9% respecto de julio de 2022», y aún representa el 52,3% de la producción total de petróleo, indicó el informe.
Mientras que «la producción de petróleo shale creció 21% interanual y registró la producción más alta para un mes de julio desde el inicio de la serie (2009)» y representó el 46,7% del total.