El gigante digital lanzó una app basada en Inteligencia Artificial y aprendizaje autónomo para calcular los posibles rendimientos en techos y terrazas de 40 países del mundo.
Google anunció un nuevo paso de su plan para contribuir en el camino hacia la transición energética, en el que cada vez se apuesta más por la generación eléctrica a pequeña escala en hogares particulares y empresas.
En estos casos la principal estrategia está vinculada con la energía solar, aprovechando los techos o terrazas de los edificios. Y quienes están pensando en avanzar en esa dirección, tanto como las empresas que ofrecen ese servicio, ahora tienen una nueva herramienta del gigante estadounidense de la tecnología.
La empresa presentó recientemente una nueva aplicación basada en la Inteligencia Artificial (IA) y en el aprendizaje automático, que permite calcular el potencial y la rentabilidad solar de los tejados de más 320 millones de edificios en 40 países.
La inversión en energía solar alcanzará en todo el planeta los 390 mil millones de dólares y, por primera vez, será superior a todo el capital destinado a la industria petrolera.
La aplicación abre así un nuevo horizonte para las empresas del sector, ya que tendrán la posibilidad de seleccionar aquellas zonas donde los paneles solares son más rentables y tienen resultados óptimos para comercializar energía renovable.
Una de las tres API de Google Maps
Esta es una de las tres API (Interfaz de Programación de Aplicaciones, de acuerdo con sus siglas en inglés) que la compañía asentada en Silicon Valley puso a disposición de los usuarios en Google Maps con información sobre energía solar, calidad del aire y niveles de polen, y con las que busca ayudar a combatir el cambio climático.
En 2015, Google lanzó en Estados Unidos el proyecto Sunroof con el que buscaba fomentar el uso de la tecnología solar ofreciendo datos sobre el potencial de energía solar de una zona y el consiguiente ahorro económico.
Ahora, ofrece API Solar, que usa recursos cartográficos y de computación y ofrece datos detallados sobre el potencial de generación solar en los tejados de edificios de 40 países del mundo entre ellos Estados Unidos, Francia y Japón.
Según informó Google, para hacer estos cálculos la compañía “entrenó” un modelo de IA para extraer información en 3D sobre la geometría de los tejados a partir de imágenes aéreas y tienen en cuenta, además, información detallada sobre arbolado y sombras y otros factores como series meteorológicas históricas de la zona o el coste de la energía.
Así, API Solar permite a instaladores y usuarios saber cuánta radiación reciben los edificios y cuál es su potencial de ahorro energético.
El desarrollo de la energía solar
El crecimiento de las energías renovables en el mundo tendrá en 2023 un hito que marcará un punto de inflexión, ya que la inversión en energía solar alcanzará en todo el planeta a 390 mil millones de dólares y, por primera vez, será superior a todo el capital destinado a la industria petrolera.
El dato fue puesto de relieve por la Agencia Internacional de Energía (AIE) como un «brillante ejemplo», aunque advirtió sobre «la desigualdad» en ese crecimiento, al punto que «más del 90% del aumento de los últimos años se encuentra en las economías avanzadas y China».
«Movilizar una mayor financiación para las economías emergentes y en desarrollo es fundamental para evitar nuevas líneas divisorias en la energía mundial», remarcó la organización.
En medio de las preocupaciones por el cambio climático y la ola de calor récord en el hemisferio norte, con un récord de temperatura en julio, algunos datos en países europeos dejan en evidencia la importancia que ha cobrado la energía solar.
Por ejemplo, España -cuyos techos y terrazas fueron incluiidos en la API Solar- ya había alcanzado en 2022 un nivel de maduración en energía solar que le permitió hacer frente al 16% de la demanda en julio de 2022, pero este año, para el mismo mes, el sector aportó el 24% del total, mientras que en Grecia en el pico de demanda eléctrica del 24 de julio la energía solar fotovoltaica cubrió el 33,8% de la demanda.
