Las asambleas de pilotos, personal aeronáutico y técnicos generaron retrasos el martes y el miércoles. Sin acuerdo con las autoridades de la compañía de bandera, se teme que la disputa escale y empiecen los paros.
Esta semana las operaciones de Aerolíneas Argentinas se vieron afectadas por las distintas asambleas de trabajadores mientras se hacían reuniones entre los directivos de la compañía de bandera y representantes de las asociaciones que nuclean a sus empleados.
El encuentro del martes a las 9:00 provocó demoras en cerca de 70 vuelos que afectaron a unos 8.000 pasajeros, mientras que el del miércoles sufrieron retrasos otros 30 viajes.
El conflicto comenzó el lunes de esta semana luego de que la reunión entre las partes no llegase a buen puerto, lo que provocó una traba en la discusión paritaria.
A raíz del contrapunto, las entidades que integran Sindicatos Aeronáuticos Unidos, publicaron un comunicado señalando que las propuestas salariales puestas sobre la mesa son «insuficientes» y solicitando un cambio de actitud por parte de los directivos de la firma.
Los representantes de los trabajadores juzgaron las propuestas salariales como «insuficientes». Aerolíneas Argentinas lanzó un comunicado asegurando que ofreció una recomposición del 8% para agosto.
“La empresa volvió a presentar una propuesta salarial muy por debajo de la inflación, que rechazamos categóricamente. Tal como lo hiciera la semana pasada, la conducción de la compañía pone sobre la mesa de negociación porcentajes que no guardan ninguna relación con el contexto inflacionario del país”, señala el documento.
“En un año de pleno crecimiento, con números sin precedentes para la empresa, están generando una situación innecesaria que impide avanzar en un acuerdo de recomposición salarial”, concluye el comunicado del sindicato que representa a la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), la Asociación de Personal Aeronáutico (APA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA).
En respuesta, desde Aerolíneas Argentinas lanzaron su propio comunicado asegurando que ofrecieron una recomposición salarial del 8% para agosto. Asimismo, informaron que se comprometieron a reabrir las conversaciones cuando se conozca la inflación de ese mes, pero que la propuesta fue rechazada por los gremios, que presionan por obtener 12%.
“Resulta importante mencionar que la empresa ha cumplido con los acuerdos anteriores, ajustando los salarios de acuerdo a la inflación acumulada durante el último año, estando los salarios actualizados y equiparados hasta julio inclusive”, agregó la compañía aérea.
Hasta el momento los sindicatos no convocaron a una medida de fuerza, y restringen su presión únicamente a la realización de asambleas que demoran las tareas y obligan a la firma a reprogramar decenas de vuelos. Las comunicaciones oficiales quedaron en pausa desde el miércoles y por el momento no hay señales que indiquen cómo concluirá el conflicto.
Los tercerizados de Aerolíneas Argentinas, otro foco
Trabajadores tercerizados de Aerolíneas Argentinas pertenecientes a la empresa GPS realizaron un corte en el acceso al Aeroparque Metropolitano. El reclamo buscó la reapertura de paritarias y un adelantamiento de cuotas urgente debido al «salario desfasado» y las condiciones laborales que reclaman desde febrero.
“Exigimos reapertura de paritarias y adelantamiento de cuotas urgente dada la delicada situación económica que golpea directamente a las y los trabajadores y sus familias. La empresa no da respuestas a los reclamos que venimos realizando hace meses, no solo salariales, sino también sobre las desastrosas condiciones laborales en las que desarrollamos nuestra actividad de asistencia y control para la línea aérea de bandera”, indicó un comunicado difundido por los trabajadores.
En esa línea, los empleados de GPS manifestaron su apoyo a los pilotos de Aerolíneas y ATE ANAC que están realizando sus propios reclamos y asambleas, pero aseguraron que “la situación de los tercerizados es aún peor, con trabajadores de limpieza que cobran por debajo de la línea de pobreza».
“Ni siquiera garantizan el pago del bono que difundió el gobierno. Sabemos que la salida de fondo es el pase a planta permanente para terminar con la precarización que todos intentarán profundizar. Las y los trabajadores de GPS enfrentamos el ajuste en curso y la defensa de todos los derechos conquistados”, concluyó el comunicado.
hay q echar a todos los sindicalistas y punto