El convenio formalizado con Córdoba prevé una inversión de 100 millones de dólares de Nación en la represa, que vuelve a la administración estatal. Hoy trabaja a la mitad de su potencial.
El desarrollo de las energías limpias avanza en Córdoba tras la firma de un convenio entre la provincia y la Nación para llevar la Central Hidroeléctrica Río Grande al 100% de su potencia.
Asimismo, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) suscribió junto con la Empresa Provincial de la Energía de Córdoba (EPEC) once contratos de renovables por un total de 28,5 MW.
Según explicaron, la central, puesta en servicio hace 37 años y que en virtud de lo convenido ahora volverá a la admnistración estatal, se encuentra operando al 50% de su capacidad.
Así fue informado por la Secretaría de Energía, que espera poner la represa a plena capacidad con un desembolso de 100 millones de dólares y en un plazo de cinco años.
El convenio no solo permitirá incrementar la disponibilidad de potencia, sino que incluye una actualización tecnológica para el Complejo Hidroeléctrico Río Grande.
De concretarse, la instalación conocida como La Catedral, que actualmente se impone como la represa de bombeo más grande del país, llegaría a generar 750 Megavatios (MW).
El apodo de la Central Hidroeléctrica Río Grande responde a que la sala de máquinas está ubicada en una caverna creada a 180 metros de profundidad para contenerla por debajo del nivel de sus dos embalses.
Otro aspecto que la destaca, es que es la primera en contar con almacenamiento para equilibrar las energías renovables. Este mecanismo genera energía durante el día dejando el agua caer desde el embalse superior hacia el inferior, para después revertir sus turbinas y rellenar el nivel del estanque superior con esa misma agua.
Así acumula una reserva energética de 100 gigavatios hora con un rendimiento superior al 70%. Adicionalmente, el sistema cuenta con un respaldo al que recurrir en casos de emergencia de carácter equivalente a una generación de base en su potencia plena durante cinco días.
El acuerdo por la Central Hidroeléctrica Río Grande
El convenio entre la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) y la Secretaría de Energía de la Nación no solo permitirá incrementar la disponibilidad de potencia, sino que incluye una actualización tecnológica para el Complejo Hidroeléctrico Río Grande.
La reunión entre las partes tuvo lugar en el salón de actos de la empresa cordobesa, y contempló también la firma de los contratos de abastecimiento de los 11 proyectos de energía renovable que fueron adjudicados a EPEC en el marco de la segunda convocatoria “RenMDI”, promovida por la cartera que conduce Flavia Royón.
Tras poner la rúbrica, la funcionaria expresó que, “la gestión del ministro Sergio Massa tiene una mirada federal y así se refleja en cada uno los hechos de nuestra política energética, una mirada participativa, que llega a cada región de la Argentina”. A partir de este acuerdo, la Central Hidroeléctrica Río Grande retorna a la administración estatal.
“Hoy se habla del rol del Estado, si debería apartarse o no, pero claramente estas cosas no son posibles sin un Estado Nacional que las piense, las diagrame y las ejecute”, completó Royón.
Por su parte, el titular de la Epec, Luis Giovine, se refirió a la importancia de la central y sostuvo que “es el puntal que apalanca el crecimiento que están teniendo en Argentina, y en Córdoba en particular, las energías renovables.”
En cuanto a los convenios con Cammesa, Epec fue la empresa con mayor cantidad de proyectos adjudicados que incluyen pequeños aprovechamientos hidráulicos, parques fotovoltaicos y producción con biogás. Los contratos establecen el costo que la mayorista pagará a la firma cordobesa por cada megawatt generado.
Además de las autoridades de la compañía local y de la secretaria de Energía, la firma de los contratos contó con la asistencia de subsecretario de Energía Eléctrica, Santiago Yanotti; la jefa de despacho de la Secretaria de Energía, Ángeles Terám; el director de Generación Hidroeléctrica, Emanuel Sánchez y el gerente general de Cammesa, Sebastián Bonetto.
